La adopción conjunta, tanto nacional como internacional, es un procedimiento legal mediante el cual los cónyuges o una pareja de convivientes, reconocidos legalmente por un juez, solicitan ser calificados como madre y padre adoptivos de un niño, niña o adolescente.
Este acto de responsabilidad compartida implica que ambos padres comparten igualdad de derechos y deberes hacia la persona adoptada. La adopción conjunta es un compromiso mutuo de brindar amor, cuidado y apoyo en cada etapa de su desarrollo y crecimiento. Al adoptar conjuntamente, los padres asumen las implicaciones legales y morales de proporcionar un entorno seguro, que garantice el desarrollo integral, bienestar y protección.